Oye, ¡PERO OYE!

Podía hacerlo todo, hasta apretar ctrl+z si cometía un error. Incluso para conseguir a alguien o algo solo movía la muñeca y con el índice hacía doble click, todo termina seleccionando el cuadro completo y dejando un ctrl+x en el aire, era cosa de abrir una nueva ventana y pensar solo en ella y olvidar las que están minimizadas, porque no valían nada. Es cosa de usar un pincel nuevo en vez de los que venían con el programa y que era súper fácil elegir el tamaño del borrador, porque entre más rápido mejor.

Era cosa de fascinarse con una versión nueva y desinstalar la antigua.

Con blur podía esconder la realidad, y como si fuera un teclado, podía configurar y dejar todo como más me acomodara. Con un anti-virus soy de fierro y nada me afecta y con Photoshop nos podíamos editar y re-editar, y dibujar con los vectores y mezclar con Fruity Loops, mas ¿qué pasó? Se chingó el programa y Fruity no funcionó, llamamos a Mixman y nos mandó a freir troyanos con Adobe A. Reader. ¿Y que dijo Bastián? Reiniciar. Y ¿qué presioné yo? Aceptar. Y ¿qué pasó? Nadie lo sabe, ni yo sé.

Así veo el amor.

# posted by Catalina Pimentel : 6:58 PM